miércoles, 19 de septiembre de 2018

Leyenda #75: Creepypasta: La investigación Bifrutas

Una tarde aburrida estaba viendo la televisión. De repente salio un anuncio de unos chavales montando en bicicleta, patinando en pistas de skate y cantando en un concierto de rock alternativo mientras se bebían una bebida anaranjada, hecha a base de leche y frutas como naranja, mango, plátano y piña.

Siempre pensé que esos anuncios iban dedicados a adolescentes que, en realidad son adultos. Me dio un poco de envidia y quería sentirme como ellos. Sentirme joven y deportista.

Compre un pack de 4 bricks de zumo. Cogí uno y los restantes los metí en la nevera para que se enfriaran. Leyendo los ingredientes del producto, estaba hecho con ingredientes naturales pero había una parte que era en un lenguaje no entendible. Era como si fuera encriptado. 


Mande un correo electrónico a la empresa que lo conseguí gracias a su pagina web. Les pregunté sobre ese ingrediente de su delicioso zumo. 

Pasaron los días y recibí un correo con un mensaje encriptado y una foto de un animal similar a un mono encerrado en una jaula.

No tenia ni idea de que era ese mensaje pero aquella foto del simio me entristecía. Era como si fuera explotado por la empresa. No era un mono normal y corriente. La parte de la frente era roja y pegada a su cabeza, como si llevará un gorro de látex. No tenia parpados en sus ojos grandes y iba vestido como un chaval normal y corriente: playera y zapatillas. Podía andar mediante dos patas.

Buscando más por Internet, encontré a un encriptador en un foro. Le mandé un correo adjuntándole lo que recibí. Este me respondió de lo que se trataba el mensaje pero me lo diría en su casa que estaba cerca de mi ciudad.

Fui a su casa y entré en un cuarto lleno de cosas de criptología. Este me enseño en la pantalla lo que había en en mensaje encriptado:

"Febrero, 2015.

Hace cosa de unos días, una criatura similar a un mono se estrelló en un prado. Un granjero lo rescato y llamo a la policía secreta. Pero sabiendo que el tema no podían estudiarlo y se les iba de las manos, decidieron hacer una puja ilegal vendiendo a la criatura a una empresa de lácteos famosa: Pascual.

Vistieron a la criatura de forma deportiva, porque sus slogans trabajan con el tema de gente joven. Mediante un anal sís de sangre, se descubrió que la criatura tenia 3000 años de antigüedad. El secreto estaba en sus genes.

Desde entonces, los productos lácteos llamados Bifrutas, les echan un condimento especial, la sangre del simio espacial.

Según el informe puede hablar mediante chillidos incomprensibles y se comporta de forma agresiva cuando se le sustrae sangre. Se alimenta a base de frutas. Por lo que el sabor de nuestros productos se disimula con el sabor de la sangre del simio, ya que es azucarada con un toque afrutado.

Los resultados de este año, han hecho que la gente se sienta más joven de lo que son y rejuvenezca. Por eso hemos bautizado esta investigación como el experimento "Carpe Diem".

El encriptador comento:

- La criatura es la ultima especie de una raza alienígena con apariencias simias llamados "Ukinianos". Este huyó cuando su planeta se quedo sin víveres para sobrevivir y cayó en la Tierra.

- Gracias, le contesté.

- Tenemos que liberarlo. Acompáñame mañana a la fábrica de Pascual y yo los distraigo y tu te cuelas y salvas al "ukiniano".

Fuimos a la fábrica al día siguiente, y tal y como planeamos el encriptador y yo, este lo distrajo y yo baje a la procesadora. Buscando una puerta y sorteando a los guardias, encontré una puerta que tenia el mismo lenguaje encriptado del correo.

Al abrir la puerta, encontré al simio. El simio me señalo que pulsara el botón rojo de al lado de la puerta de entrada. La puerta se abrió. El simio con tranquilidad toco el suelo y del suelo empezó a formarse una capa de hielo hasta hacerse una tabla de hielo. Luego se acercó a mi y me toco la frente con un dedo. Me hablaba por telepatía.

- "Fui yo el que te mande el correo encriptado. Nuestra tecnología es más avanzada que la vuestra, por lo que formatear una base de "Atención al Cliente" como vosotros lo llamáis no es problema. Tu planeta es miserable y nefasto, me han exprimido para que les diera mi sangre, cuando podría haberse la dado sin necesidad de tanta experimentación , a cambio de frutas. Pronto sentiréis la muerte."

Del impacto perdí el conocimiento. Acabé en el hospital con una multa de la empresa Pascual por colarme en su empresa, en el área privada, sin permiso.

Pascual dejó de producir anuncios de chicos jóvenes y cerró. Los jóvenes de los anuncios y los que lo bebían, murieron ya que ahora el liquido que ingirieron pasaron a su metabolismo y este cambio como si fuera magia y envejecieron drásticamente.

A mi me pasó un poco menos, pero me siento como si tuviera 30 años más. Del simio no se supo nada más salvo aquella noticia.

Un día de febrero, iba por la calle y una furgoneta naranja me secuestró. Era una furgoneta de Bifrutas. Me llevo a una playa llena de gente vieja. La empresa resurgió ya que el encriptador dio el ADN del simio y copiaron la receta.

- ¿Donde estamos? le pregunte a uno de los viejos de allí.

- En una pesadilla continua. Llevo grabando anuncios desde que tenia 18 años haya por el 2000. Nos dan esta asquerosa bebida que nos rejuvenece y nunca envejecemos y nos tiene apresados en este plató que simula una realidad joven.

Un señor con bata blanca me dio aquella bebida y otro guardia me apuntaba con su calibre en la cabeza para que lo bebiera. Lo bebí y recuperé la edad de cuando era joven. Otros nos apuntaban desde lo alto del plató con subfusiles. Un director del anuncio dijo: "¡ A sus puestos! ¡Acción!" y dio paso a una nueva pesadilla, la de no morir estando vivo.









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