- - No me gusta este lugar está lleno de arañas,
suciedad, humedad, ratas y muñecas con el ojo pipa y medio rapadas.
- - No tengo la culpa de que los edificios se
construyeran en un antiguo refugio para la gente que huía de la guerra. Solo
abajo encontrarás lo que buscas.
- - ¿Mis cromos, mis juguetes noventeros, mis
Teletubbies, mis tazos, algunos llaveros, mí pelota saltarina de araña y mis
VHS con la película de los Power Rangers y las series animadas que una vez
olvidé así como mis revistas de Megatrix?
- -Todo eso.
- -Me da miedo…
- -Tienes muchos años para tenerle miedo…
- -Bueno visto así sí.
Abrimos la puerta del sótano con la pequeña
llave. Bajamos de un salto. Todo estaba tal y como había descrito. Telarañas,
arañas, muñecas siniestras y mancas, ladrillos consumidos por el polvo. Solo teníamos
que torcer a la izquierda. Abrimos la puerta de madera, hinchada por la humedad
y comida de polvo y telarañas y encendimos el interruptor. Pero de repente algo
malo pasó. Mi padre tocó una araña.
-¡Oye! Más cuidado humano. Casi me aplastas
y te podría picar. Ah claro, estoy encima del interruptor. Bueno, perdone
usted. Que tenga un arácnido día. Jajajajaja. Arácnido. Fantástico. Me llaman
bichito. Pero podéis llamarme patas largas octavo. Soy vecino de esa caja de
galletas que lleva años aquí.
- ¡Vamos Maor! ¿A que estas esperando?.
Fui corriendo a abrirla y allí estaba todos
mis juguetes, mis cromos, mi pelota de araña, mis tazos, mis fichas y lo mejor
de todos mis videojuegos que una vez se rompieron, están arreglados. ¡Qué
maravilla!
De repente, el sótano ahora era una sala
embaldosada, bien iluminada con unos buenos fluorescentes y la parte donde
estaba derrumbada ahora era un salón de administración.
- -Disculpe, ¿puede ayudarme a traer esas cajas que
están en la puerta pequeña?
- -Claro. ¡Vamos a ayudar a este desconocido
administrador, Maor!
Ayudamos a coger las pesadas cajas. Junto
con mi padre y ese señor las abrirnos. Y eran muchos VHS. Los colocamos por un
largo cajón enumerado alfabéticamente.
El señor me explicó que en cada puerta había
unos apartados donde se clasificaban todas las colecciones que se habían creado:
Llaveros, juguetes de los 2000, 90,
80,70, 60, 50, 40, 30, 20…, cromos, cromos de chicles, tazos, pegatinas, pines,
chapas, VHS. De todo lo que uno pudiese imaginar. Esto fue creado como museo o recuperación del
patrimonio coleccionista. Pues la gente podía usarlo, algunas cosas, recuperar
otras, crear otras, hacer doctorados en una colección, ect.
- - La gente ama mucho las colecciones y gracias a
tu empeño coleccionista, fundamos el centro de recuperación y administración de
colecciones. Como meta tenemos la conservación y recuperación del patrimonio histórico
coleccionista. Mira ese chaval ha hecho una tesis de como los VHS animados te
dañan la vista con esas mini filitas que le salían al iniciar el video. Ese
otro me ha entregado que las pelotas saltarinas bota, botan su pelota pero esto
es comunitario, así que es nuestra pelota y como la canción debería cambiarse.
- - Todo esto es fantástico y absurdo a la vez.
- -Lo es, porque lo has soñado y lo has hecho
realidad. Felicidades.
Oh, lástima que sea otro sueño más. Pero, ¡vaya sueño! Mejor lo escribo y lo subo
al blog. Pero es la mejor historia que has leído en tu vida ¿No lo crees? Cada
uno escribe y valora lo escrito a su
imagen y forma. Esta historia no tiene
un solo “herror”.
¿Qué tal una historia de un niño que juega
con Vegeta, un personaje representativo del cuerpo humano llamado “Esqueli”,
Mickey Mouse y Bugs Bunny contra la oscuridad? Hasta donde seré capaz de soñar…
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